En 1885, Felipe Rutini -fiel al linaje italiano de su familia- mandó construir una bodega a la que llamó “La Rural”. Ese mismo año, con la llegada del ferrocarril a la provincia, el transporte del vino que hasta ese momento se hacía en carretas logró agilizarse dando gran fuerza a la industria.
A un mismo tiempo, Felipe Rutini fue pionero en implantar vides en el Alto Valle de Uco e innovador en cuanto a procesos y técnicas de elaboración que permitieron a la bodega construir un sólido crecimiento a lo largo de su historia.
